Qué son y cómo funcionan los pactos de adaptabilidad que quiere ampliar el gobierno con la reforma
Ejecutivo propone que las empresas sin organizaciones sindicales también puedan acordar distribuir la jornada laboral en cuatro días.
En los últimos días ha estado en el ojo del huracán la propuesta del Ejecutivo de distribuir la jornada laboral de 45 horas semanales en cuatro días, más conocido como 4x3. Pese a que la idea aún no ingresa al Congreso, ha sido criticada por algunos sectores, quienes han señalado que para adoptar esta modalidad se tendría que trabajar, a lo menos, unas 11 horas diarias, lo que no permitiría una real conciliación trabajo-familia.
Pero lo cierto es que esta alternativa ya existe en el Código del Trabajo a través de los pactos de adaptabilidad.
La norma plantea que dichos instrumentos permiten a las partes -empleador y sindicato- acordar libremente, y sin sujetarse a negociaciones colectivas regladas, jornadas semanales de cuatro días de trabajo por tres de descanso y el cumplimiento de las labores en lugares distintos al de la empresa para los trabajadores con responsabilidades familiares.
“Estos pactos durarán un máximo de 3 años, serán factibles sólo en empresas con una afiliación sindical igual o superior al 30% y no serán acordados en negociaciones colectivas regladas, pero dependerán de que los estatutos sindicales establezcan cómo se aprueban estos pactos o, si los estatutos nada dicen, que los socios lo acepten por mayoría absoluta en asambleas realizadas ante un ministro de fe”, dice la legislación.
De todas formas, se trata de una herramienta muy poco usada. Según datos de la Dirección del Trabajo, se han suscrito 15 pactos, de los cuales 11 se refieren a distribución de jornadas 4x3 (involucrando a 621 trabajadores) y cuatro a trabajadores con responsabilidades familiares (385).
¿Las razones? A juicio del subsecretario del Trabajo, Fernando Arab, dos serían las principales razones de la escasa aplicación de pactos. “Primero, porque se exige un porcentaje de sindicalización bastante superior al promedio nacional (30% v/s 20%), lo que los hace privativos de un universo muy restringido de trabajadores y empresas”, explicó. Y, dos acotó, sólo los sindicatos pueden negociarlos.
Sobre esta última materia, el proyecto de adaptabilidad laboral del Ejecutivo innovará, ya que si bien los pactos seguirán siendo negociados por los sindicatos, los trabajadores de firmas sin organizaciones sindicales también podrán suscribirlos.
“Un universo muy importante de trabajadores, principalmente de las pymes, que no están sindicalizados, no tienen la posibilidad de pactar una jornada de este tipo que les permita mejorar sus tiempos de descanso al otorgarles tres días de descanso continuos. Creemos que no resulta justo para la gran mayoría de los trabajadores que no puede acceder a este tipo de jornadas, seguirlos privando de aquella. Esta es una alternativa que creemos contribuirá a mejorar la calidad de vida de los trabajadores que accedan a ella”, agregó Arab.
El subsecretario, además, sostuvo que el proyecto además propondrá nuevos tipos de pactos, “tales como de jornadas semestrales y/o anuales. Así, por ejemplo, podría pactarse que se trabajara menos durante los meses de invierno y más en verano, o viceversa, dependiendo del grupo objetivo de trabajadores involucrados”, explicó.
Hoy la voz más fuerte es la del sindicato
El director del Trabajo, Mauricio Peñaloza, recalcó que existen dos tipos de pactos de adaptabilidad (jornada 4x3 y trabajadores con responsabilidades familiares), a los cuales se puede acceder a través de nueve modelos que el servicio tiene publicados en su página web. Con respecto a los pactos de condiciones especiales de trabajo de jornada 4x3, la norma establece que no podrán exceder de 12 horas diarias de trabajo efectivo, incluidas la jornada ordinaria, extraordinaria y los descansos. Además, dice que si la duración de la jornada diaria pactada es superior a diez horas, el descanso para la colación deberá ser de una hora, imputable a dicha jornada.
Con respecto a los pactos de responsabilidades familiares, Peñaloza explicó que en estos se debe establecer "una combinación de trabajo presencial en la empresa y trabajo a distancia, desde otro lugar que no sea la oficina, y debe quedar claro dónde se realizará y por cuánto tiempo (...) Además del pacto entre el empleador y el sindicato, se requiere un anexo de contrato con cada trabajador individual que lo quiera usar", dijo.
La autoridad recalcó que el sistema actual sólo permite a los sindicatos acordar pactos de adaptabilidad.
La existencia y funcionamiento de los pactos sobre condiciones especiales de trabajo son fiscalizado por la DT, y si durante la fiscalización el servicio concluye incumplimientos de requisitos o vulneración de normas de higiene y seguridad, el Director del Trabajo podrá dejar sin efecto el pacto.